martes, 19 de abril de 2016

Noesi- revolución : noesiteraia, soberanía financiera y MENTAL.

                                                                                                                                                               

                                      Noesi- revolución
              
      
    Aquél día, tuve demasiado trabajo. "Tuvimos" demasiado
 trabajo, pero 
como la resignación era máxima, y el asociacionismo 
mínimo, prefiero 
decir solo "tuve". Una de las compañeras había sido
 despedida, y 
no aguardó, ni a esperar unos días hasta que entrara
 la nueva, ni a 
hablar en un sindicato antes de firmar su "baja voluntaria", 
de manera
 que debió de firmarla, para largarse cuanto antes de ahí.
 Así que imagínate,
 si con las que éramos, nos llegaba justo para dar de
 cenar, medicar 
y acostar a todos los abuelos, una menos, fue como 
una patada en
 la espinilla, así de claro. O, para ser más exacta,
 en los riñones. 
La gente que  no ha trabajado nunca en esto, no
 sabe lo que es 
levantar, sentar, alimentar-medicar los más
 rápidamente posible, 
lo más rápidamente posible llevar al servicio
 para que hagan 
necesidades o cambiar rápidamente el pañal y 
rápidamente acostarles. Y 
levantar es aún más trabajoso pues requiere 
más servicios como el de la 
ducha y el de las curas cuando no hay enfermeras
 por ser festivo.
 Después, pensándolo, me pregunté...lo que siempre
 me preguntaba: 
¿por qué la gente trabaja solo por dinero?¿por qué 
no por el bien de
 la comunidad?¿por qué en la residencia no puede
 haber más 
personal para que el trabajo sea más dulce y 
menos... militarizado, por
 decirlo de algún modo?. No sospechaba, mientras 
me hacía, como 
de costumbre, estas preguntas conduciendo de 
camino a mi casa que
 recibiría una llamada de teléfono que sería el 
principio de muchas 
respuestas.
  A eso de las diez y media de la noche, sonó el teléfono
 fijo y era Aurora, 
mi amiga de Toledo que hacía unos años había perdido 
su trabajo en la
 oficina de una inmobiliaria y mucho dinero en Bolsa 
con el estallido 
de la burbuja aunque tuviera la prudencia de 
recolocar muchas de 
sus acciones en temas diferentes al ladrillo cuando
 algo malo se 
empezaba a oler en el ambiente. Siempre fue muy 
avispada para 
el tema especulativo, y del grupo de amigas y 
amigos jóvenes que
 éramos, ella era la única que apostaba en el
 Mercado de Valores.
  -"¿Qué tal te ha ido hoy en tu jornada laboral?.- me 
preguntó y yo
 le expliqué con algún que otro detalle anecdotico lo 
que había pasado.
   Entonces, me sorprendió con una pregunta sobre
 un recuerdo, 
que en la vida me hubiese imaginado que podría 
hacérmela, lo juro.
  -"¿Te acuerdas de aquella vez cuando yo seguía 
en la inmobiliaria
 la discusión que tuvimos, en la que no nos 
poníamos de 
acuerdo, acerca de la "economía del bien común", que yo 
al final te dije que habías venido a conocer Toledo y no me
 dieras más "la chapa" con esas utopías?
  -¡¡Cómo no me voy a acordar!!.- exclamé intrigada.
  -Bueno, pues tú tenías razón, toda, absolutamente
 toda la razón. Lo 
que pasa es que estamos tan inmersos en esta 
cultura del "sin sentido", 
que lo que es normal lo llamamos "utopía".
  Como paró de hablar le dije, sin poder dar crédito
 a lo que acababan de 
oír mis oídos: -¿de dónde te has caído hoy, que
 estás irreconocible?.
   -¡Hay Sara!, ojalá me hubiera caído antes. ¿Te crees 
que hay derecho a 
que el gobierno PERSIGA a las asociaciones de vecinos
 que tienen bancos
 de alimentos, que les PROHÍBAN tener esos bancos
 porque hacen la 
competencia a Cáritas y otras instituciones verticales?.
   -¿De qué me estás hablando?.- le pregunté expectante.
    -De que a nuestro amigo Juan, que colaboraba activamente
 en uno de 
esos bancos de alimentos formado por una red de víctimas 
de la crisis 
aquí en Toledo, le han dicho a él y a los demás, que no sigan
 organizándose
 ni con el reparto de alimentos ya que eso "ha de 
estar regulado
 por una institución".
    -¿Qué me dices?.- le respondí preguntándome,
 hasta qué punto aquello 
sería verdad.
   -Eso no sale en la caja tonta y el negocio de la mafia 
NO ES EL DINERO,
 es... la... esclavitud.- concluyó trabajosamente, como si
 le costase admitirlo.
   Como no quiero extenderme y parte de lo más importante
 de aquél diálogo
 ya está escrito, acabaré diciendo que ella me ofreció ir a Toledo... 
¡para trabajar como socia en la cooperativa de la cual ella
 forma parte,
 cuya actividad es una residencia geriátrica!
   -Ya sabes que llevo unos años en esta cooperativa de la 
que te hablé. 
Si vienes, lo ves, y decides hacerte socia, no te
 arrepentirás. 
Necesitamos personas como tú, con ideales, con
 preguntas sobre el mundo...
   Así que en cuanto tuve mis dos días libres, me 
fui a Toledo, no
 sin que antes mis padres me sermonearan 
diciéndome que para 
qué me iba a molestar en ver cómo es aquello,
 que las 
cooperativas "no funcionan", bla,bla,bla...
   Como el edificio de la residencia, según me indicó, tiene
 garaje, entré 
con mi coche a la ciudad antigua siguiendo las 
indicaciones que me había 
dado mi amiga y las del GPS. Estaba todo, como siempre,
 lleno de turistas 
y guías en aquella tibia mañana de abril y me satisfizo
 ver que el geriátrico 
guardaba el estilo histórico-artístico de la ciudad, como debería
 ser en todas partes.
   Lo primero que me llamó la atención al entrar al vestíbulo 
acompañada de 
Aurora fueron dos cosas : las canciones de Lara Besalú, 
que sonaban 
dulcemente a través del hilo musical, combinadas con las
 mejores de
 Ana Alcaide.- solo que en las de Lara Besalú, se apreciaba 
una sutil y
 contundente crítica al sistema dominador de todos los
 tiempos más la 
mención a la necesidad de crear economía al margen,
 además de poder 
escucharse las traducciones del árabe antiguo y el
 ladino (una mezcla 
de hebreo y castellano antiguo) al castellano
 actual.- junto a un intenso
 aroma a rosas, alhelíes,violetas, jaras y otras
 flores aromáticas que 
entraba desde el patio toledano que también posee
 el edificio, por
 una puerta entreabierta. Ambas artistas recreaban 
armoniosamente 
sonidos de instrumentos populares en otras épocas,
 de varios lugares 
del mundo, como además del rabel toledano, el santur,
 la nickelarpa,
 la cítara, flautas traveseras, etc.
    Mi amiga y guía, Aurora, me iba contando mientras 
me enseñaba
 esos generosos jardines y las coquetas estancias de 
sabor antiguo, 
poéticos dibujos de Toledo y adornos referentes a las 
tres culturas, 
muchos pormenores del estilo residencial de la 
cooperativa al mismo 
tiempo que veíamos a otros socios y a los residentes,
 charlando a veces
 un poco con ellos.
    Contaban con servicios de jardinería, aromaterapia, musicoterapia,
 salón de 
té con plantas medicinales, frutoterapia, masajes... y la clínica privada
 de al lado, 
que en realidad era... otra cooperativa, una colectividad médica
 con tratamientos alternativos para quien los quisiera.Todo ello, 
era nuevo para mí: la medicina, 
el número de socios trabajadores en la residencia que era 
muy generoso, 
variopinto y con organización horizontal, la alegría que por
 primera vez palpé 
en el ambiente de ese lugar, pues donde vivía antes, se 
hubiera considerado 
solamente un "lugar de trabajo", la CALIDAD del servicio,
 con actividades 
auténticas y tiempo de sobra para que los abuelos estén muy
 bien atendidos. 
Algunos de los socios, tenían ahí a sus padres o abuelos o a 
uno de ellos y las
 visitas y salidas, disponían de un horario muy generoso.
  En cuanto al aspecto legal, la sociedad estaba constituida como
 cooperativa 
solo con el capital privado de todos los socios, si bien Aurora 
había aportado 
más, debido a todo el dinero que tenía ganado en acciones que 
no era cualquier 
cosa y nunca quisieron, aun sabiendo que el dinero en realidad 
es del pueblo, subvenciones para... "no tener que estar plegados a 
ninguna condición que les
 pudieran imponer", lo cual en ese momento y sin más
 explicaciones, no lo 
comprendí.
  Pero... fue en la oscuridad de la noche cuando me 
esperaban respuestas 
y nuevas facetas de la empresa colectiva y... el 
meta-mundo que la trascendía. 
Fue en la animada oscuridad de la noche toledana
 cuando un animado grupo 
apartado del mundanal ambiente nocturno tuvo la mejor relación.
  Aquella primera noche de mis dos días libres en Toledo
 tuve mi primera 
reunión secreta en las "catacumbas". No es ningún misterio
 que la ciudad 
está hueca, es rica en restos arqueológicos, tuvo, como
 una estrategia 
defensiva más, y tiene, una red de galerías subterráneas, 
una de las cuales 
se puede visitar, que antiguamente estaban comunicadas 
con casas, iglesias, 
conventos... el alcázar y la catedral.
   Pues bien, una de las entradas a uno de esos túneles está
 en la residencia; 
nuestra residencia, llamada Libertad, aunque muy bien 
disimulada por un 
armario... cuyo fondo es una puerta corredera que deja 
una rendija libre.
   El túnel y sus ramificaciones con escalones que suben 
y bajan era y es, 
ancho y alto, con el aspecto de cuevas acondicionadas 
para el tránsito y nos alumbrábamos con unas potentes linternas.
 Llegamos a una sala repleta de 
bolsas con alimentos y agua, en la que ya nos estaba esperando, 
para mi 
grata sorpresa, nuestro amigo Juan, a quien hacía tiempo que no 
veía y de 
quien recordaba que Aurora me había hablado de él por teléfono, 
contándome 
cómo sufrió represión por parte de las mal llamadas "autoridades", 
para 
impedirle a él, y a los demás miembros de la asociación de vecinos, 
continuar
 con su actividad del banco de alimentos. 
   -¡Juan!.- exclamé jubilosa.
   Y él, me dijo con su seductora voz mientras nos dábamos un 
par de besos 
y un largo abrazo,"-Hola Sara. Sabía que no nos fallarías.- 
" .Le noté bastante 
cambiado, tanto física como mentalmente  y comprendí,
 que nunca le había 
visto tan atractivo como en ese momento mientras me 
explicaba de qué 
manera tuvieron que burlar al Estado con el asunto de los alimentos.
   -Ahora, hemos de usar estas vías, al menos las de los
 asociados, para 
esconder el banco, las cuales tuvimos que rehabilitar 
en secreto porque 
estaban selladas por algunas partes y no podíamos 
comunicar bien nuestras
 viviendas y locales. Son quienes precisan estos
 víveres quienes han de 
desplazarse hasta mi casa y otras casas para llenar su 
carrillo, mochila, 
bolso grande o lo que sea, siguiendo un horario muy 
estricto para que 
no acudan todos de golpe y de ese modo avisar a la pasma, 
aunque quienes
 forman parte de la Noesi-revolución, prefieren cargar aquí 
mismo por la noche.
  "Noesi-revolución". Juan fue la primera persona que me nombró
 ese concepto. 
Aurora me había hablado de la noesi-terapia y su descubridor, 
el doctor Escudero,
 ya que se emplea en la cooperativa médica de al lado de la 
residencia, y si eso, 
me dejó sin aliento, hay que imaginarse como me quedé cuando
 el prefijo "noesi", lo escuché al lado de la palabra "revolución".
   Juan me resumió brevemente, mientras Sara asentía, que si la
 noesi-terapia
 consiste en educarse mentalmente y ayudarse de la saliva para 
repeler el miedo
 al dolor y el mismo dolor, eso, también es extrapolable para 
repeler el miedo a la
 represión y el otro miedo, el cultural, y su dolor cultural implícito,
 para hacer la 
revolución, pero que cuando llegara el médico cirujano de la 
clínica colectiva,
 a mí, y a otros iniciados cuidadosamente escogidos, nos lo
 explicaría más 
detalladamente. Me reveló que a esas reuniones, ahora de 
momento no podía
 ir cualquiera, y de hecho tuvieron que hacer una criba para
 evitar a algunos 
supuestos activistas que "estaban en todos los fregaos" pero 
entorpecían 
la buena marcha del proyecto verdaderamente emancipador, 
e incluso fueron distanciándose de ellos.
   Entonces, un poco más allá, se abrió una forma rectangular 
del techo encima
 de unas escaleras, por donde, al mismo tiempo que entraban 
unos cuantos 
hombres y mujeres se veía una luz tenue que dejaba percibir... 
columnas muy 
blancas y cuando pregunté, me dijeron que se trataba de la 
sinagoga de 
Santa María la Blanca, en la cual celebraríamos nuestra 
reunión. Siete personas desconocidas, cuatro hombres y tres mujeres;
 menos uno de los hombres, 
los demás se dedicaban a aprovisionarse en el banco de alimentos
 llenando 
sus mochilas y bolsas de viaje. Sara me llamó la atención 
para presentarme 
al hombre que no estaba con los demás. Era y es Samuel,
 el médico 
noesi-terapeuta de la clínica colectiva y, como me había 
contado antes, 
su novio, que me resultaba, igual que a Sara, muy sexy 
con esa ajustada
 camiseta que le hacía parecer un deportista de gimnasio
 y... por todo en 
general, de modo que supuse, que detrás del cambio 
radical de mi amiga 
en cuanto a valores y pensamientos, ese hombre, 
médico noesi-terapeuta... 
debió de influir... mucho. Porque todo influye y es verdad.
 Después accedimos a la sinagoga, ese emblemático
 edificio de los 
siglos XII y XIII que parecía más una pequeña mezquita
 que otra cosa 
debido a que en aquella época, al parecer los constructores
 encargados 
de su restauración contratados por el judío tesorero del rey,
 eran árabes y
 parece que a ese funcionario de la monarquía y al resto
 de la comunidad 
judía no les importó el aspecto que tuviera su lugar de
 culto y reunión. 
La abertura secreta se tapaba después de cerrarse, con la 
plataforma deslizante
 de madera, del altar perteneciente a su posterior 
propiedad cristiana.
   En la sala, muy tenuemente iluminada, aunque parezca mentira, 
había por
 lo menos diez personas más y después de algunas presentaciones y 
comentarios formales, Samuel se colocó en el centro y sacó un libro 
perseguido, maldito, prohibido... abriéndolo por la página 
que le interesaba
 para proceder a su lectura, que ahora transcribo, del mismo
 ejemplar de 
ese libro que está en mi poder : 
   "Veamos el currículum vitae de un ciudadano medio de 
cualquier sociedad 
moderna de un país desarrollado con brevedad y con las inevitables 
generalizaciones:
un niño nace, y acto seguido, es vacunado por el miedo

 que sus  padres
 tienen a las enfermedades. Posteriormente, con cuatro
 o cinco años, 
sus padres le escolarizan por miedo a no poder ofrecerle
 ellos mismos 
una educación que integre a su hijo en una sociedad a la que 
tienen miedo.
El niño crece aprendiendo de un profesor al que tiene miedo,

 comportándose
 según los 253 patrones establecidos por miedo a no ser
 aceptado por el grupo,
 respetando a otros niños y profesores que amenazan a
 través del miedo. 
El niño continúa insertado en el sistema educativo 
 –“estudiando”- por miedo a decepcionar las expectativas
 colocadas en él.
Dentro de ese sistema, “escoge” una formación universitaria

 por miedo al 
porvenir, miedo al futuro, miedo a quedarse encerrado: busca
 una “salida” 
profesional. En este medio pre-universitario, se inicia en la sexualidad, 
poniéndose un condón por miedo al SIDA.
Finalmente inicia sus estudios universitarios según los miedos
generales: carrera con más “salidas”, preferencia de la 

familia miedosa, 
ambiente de miedo...
En la universidad tiene miedo a suspender, miedo a perder

 la “beca”, miedo 
a tener que pagar más dinero por tener miedo; y, tras unos 
cuantos años de 
angustias y miedos, se “gradúa” en un estudio del que tiene
 miedo que no 
sirva para  insertarse en el mercado laboral. Por este miedo, 
hace un “ master ”, 
una “post-graduación”, una especialización porque tiene miedo 
de que lo ya 
estudiado no sea suficiente.
Paralelamente, como tiene miedo a la soledad, conoce a una 

mujer y, tras cierto 
miedo al compromiso por parte de ambos, deciden casarse,
 a pesar del miedo 
que supone hacerlo sin tener un
empleo estable. Sin embargo, él consigue un trabajo en 

una corporación a 
través de un proceso selectivo que da miedo.
Trabaja en una corporación más de 40 horas semanales

 por miedo
a quedarse en el paro, y no poder afrontar la hipoteca que firmó

 para vivir en un apartamento en el que su mujer tiene miedo 
cuando se queda sola.
Él obedece a un jefe al que tiene miedo; inculca miedo a 

sus subordinados; 
actúa tal y como se espera de él por miedo a no ser aceptado
 por la empresa; 
silencia indignidades que presencia dentro del entorno de 
trabajo por miedo a 
romper el “secreto profesional”. Poco a poco, es promocionado:
 él tiene miedo 
a no poder con tanta responsabilidad; no tiene tiempo nada 
más que para el
 trabajo, y así su matrimonio se ve afectado.
Él tiene miedo de que su mujer le sea infiel, por lo que él

 mismo engaña a su 
mujer con la secretaria, completamente a escondidas,
porque tiene miedo a que lo descubran. Sigue promocionando

 en el trabajo 
aunque tenga miedo a la crisis y a los recortes de plantilla. 
Tiene poder 
adquisitivo y puede comprar ciertos productos que 
aplaquen su miedo: firma 
254 seguros varios que cubren riesgos a diferentes 
miedos (incendios, accidentes, terremotos...), apoya activamente a 
partidos políticos que hablan del miedo 
a una amenaza terrorista, se hace una vasectomía por miedo 
a tener más 
hijos de los que ya tienen (1 ó 2, si es que tienen), compra
 una gran casa 
en las afueras de la ciudad por miedo a la inseguridad
 del centro, y la 
blinda con muros, alarmas y cámaras por miedo
 a los ladrones.
Continúa trabajando en la corporación, y ahorra 

mucho dinero que 
guarda en un banco por miedo a perderlo. También
 invierte en un 
plan de pensiones porque tiene miedo de llegar a 
viejo sin garantías
 sociales; también firma un seguro de vida con 
50 años porque tiene 
miedo de morir demasiado pronto. Así, con sesenta y pico
 años, se jubila
 en la empresa, y tiene miedo de sentirse inútil y miedo
 a aburrirse. Como 
defensa de estos miedos, se convierte en un
jubilado insoportable, y ese mal carácter le causa 

algunos problemas de salud. 
Visita al médico, y este le mete el miedo en el cuerpo, del infarto, 
del colesterol,
 del cáncer, de la artrosis... Evita todos los vicios que ha tenido 
durante toda su 
vida, y que en la vejera le causan miedo. Ya es tarde: 
enferma gravemente
 y –como tiene un miedo atroz a la muerte- la medicina 
moderna hace todo 
lo posible para prolongar la enfermedad. En una agonía
 mantenida con 
fármacos, los médicos le suministran potentes opiáceos
 que alejan al 
moribundo del miedo al dolor.
El ciudadano moderno muere, y su último pensamiento fue

 observar el 
miedo a cuestionarse si la vida así vivida tiene algún 
sentido..."(...) "
Todas las reacciones que el moderno identifica como 
"vida" no
 resultan ser sino un encadenamiento causal y efectivo
 de miedos 
(individuales, colectivos, racionales, irracionales...)
 y - a través de la
 gestión de esos miedos- el ciudadano 
moderno construye su historia personal.Por supuesto
 que el miedo 
puede ser algo natural: el hombre ve una serpiente, 
siente miedo, y 
reacciona retrocediendo.Sin embargo, el número, la
 intensidad y la 
repetición de los miedos del hombre moderno están
 muy lejos de ser 
algo natural"
  Sí, ese libro es "La danza final de Kali", del autor anónimo
 cuyo pseudónimo
 es IBN Asad y nunca había oído hablar de él, por 
razones obvias.
   Tras la lectura, hubo un momento de silencio, que parecía servir para 
"masticar" bien todas aquellas palabras, y después de una breve 
charla-coloquio sobre la misma, Samuel fue más directo: 
  "-El miedo es nuestro peor enemigo, pero a veces forma
 parte de manera 
invisible, de nuestro sistema económico-filosófico, de la 
ingeniería social a 
la que nos han adaptado, de modo que lo identificamos con la
 verdad biológica, 
cuando solo se trata de un miedo generado por una verdad 
conceptual diseñada 
por nuestros ingenieros sociales, rematada por las masas,
 y por lo tanto 
rediseñable, no es inamovible. Si nos diéramos cuenta, de 
que el sistema en 
el que vivimos es de cartón-piedra, más falso que la 
moneda oficial... 
empezaríamos a tener menos miedo.
  Dicen que ha habido épocas en las que el triunfo del Estado ha 
sido mínimo
 y el del pueblo máximo. Se trataría de ir encaminándonos poco
 a poco a una 
de esas épocas.
  Se supone que yo soy judío sefardita.Digo "se supone" porque 
solo es una 
verdad conceptual, ya que los ingenieros sociales que nos 
precedieron se 
encargaron de hacer "remakes", adaptar, re-diseñar... antiguas 
historias para
 inventar e introducir en las mentes las tres grandes religiones
 monoteístas 
que parecen divisiones de una misma porque las tres están 
hermanadas: judaísmo, cristianismo e islamismo. Y éstas a su vez, 
tienen sus ramas con otras 
interpretaciones, algunas de ellas minoritarias. Y yo... 
¿he de ser judío 
porque a mis ancestros mafiosos se les ocurrió 
implantar y expandir 
ese, en aquel entonces, Nuevo Orden Mundial, 
basado en el monoteísmo 
y la "guerra fría y caliente" entre el islám y el cristianismo?.
 Tengo muy claro 
que son tres religiones distintas y un solo culto verdadero.
Si lo comparamos con el neoliberalismo, la socialdemocracia
 y el comunismo 
¿qué nos sale?.Lo mismo,¿no?.
 Es decir, independientemente de que en algunos lugares el pueblo,
 económicamente 
haya estado mucho mejor con el comunismo, como pasaba en
 Rumanía, donde 
había tantísimo trabajo, que trabajar, como ir a la escuela, era 
obligatorio y por eso, y porque no tenía deuda externa asesinaron a
 Ceauccescu, son tres ideologías 
"distintas" y una sola ideología verdadera, la de la MAFIA,
 que es la que aísla 
a los diferentes grupos humanos en esas ideologías... 
distintas hasta cierto 
punto. Aislarse, en este caso, significa seguir a alguien
 y sus directrices, 
incomunicándote, por tanto, con quienes siguen a 
otras personas y sus 
directrices. Lo contrario, comunicarse, relacionarse,
 significaría pensar,
 investigar, desarrollar ideas por nosotros mismos 
sin seguir a nadie y
 por lo tanto interactuar.
  Esto es muy importante porque cuando yo, por ejemplo,
 leo la melonada 
histórica de que la mafia cristiana impidió a los judíos 
tener tierras, pero les
 permitió además de ser artesanos, ¡¡prestamistas...!! ,
 debido a la hipocresía 
de la iglesia católica, que no permitía el préstamo a
 un interés, y sin 
embargo, esos prestamistas BENEFICIARON a los
 reyes y nobles porque 
podían disponer de financiación... me quedo literalmente
 asustado al 
preguntarme cuántas personas 
de las que leen eso, se lo creen así, tal cual.
  Como muy bien dice la frase, lo importante no son las respuestas,
 sino las 
PREGUNTAS. No hay que parar de hacerse preguntas, y si 
algo no 
cuadra decirlo: esto no me cuadra.Nunca se encontrará
 ese detalle
 en escuelas, institutos y universidades, a donde se
 acude para 
"labrarse un porvenir incando mucho los codos" y
 ya está.
  Si a eso añadimos la actual locura dominadora 
contra el pueblo 
palestino que 
en nombre de todos los judíos esa mafia mundial
 está perpetrando 
por increíble 
que parezca impunemente, dando la sensación de
 que quiere presumir
 de tener 
a todos los judíos de su lado, además de sentirme insultado
 en mi  
inteligencia, me deprimo ante ese sinsentido, y no puedo
 por menos de
 decir ¡basta! y por eso, como
 ya no necesito justificar mi origen en España para
 poder vivir aquí 
como "judío sefardita retornado", voy a intentar, a 
ver si lo consigo,
 hacerme 
apóstata de esa religión que no me pertenece, porque
 no es algo que 
mane de mí, 
sino un conjunto de costumbres heredadas por la inercia 
generacional, por lo 
tanto no son mías, y la única voz de autoridad que reconozco,
 es la mía.
   Y ahora vamos a lo práctico. Aquí en Toledo además del 
banco de alimentos 
hay dos colectividades sanitarias que funcionan... NO SOLO con
el capital OFICIAL aportado por sus socios sino, al igual 
que el banco
 de alimentos, con la moneda complementaria que compartimos 
todos los socios de la aventura anti-sistema 
toledana. Gracias a esa moneda, el neo-maravedí, el servicio
 puede ser más 
barato al no cobrarse todo en euros, se impulsa y fija con
 más solidez la 
economía local y no se depende de las subvenciones
 de la mafia. Por eso, 
hay auxiliares de ayuda a domicilio que han expresado su 
deseo de formar
 una cooperativa valiéndose del neo-maravedí, lo cual es 
mucho más sencillo
 si tenemos en cuenta que ese servicio no precisa de 
instalaciones y están 
decididas a apostarlo todo por nuestra moneda local, de manera que lo 
cobrarían todo, si hace falta, en neo-maravedíes.
  "Qué valientes son", estareis pensando algunos y algunas
 de vosotros. 
Afortunadamente, es algo mucho mejor que la valentía. 
Como diría nuestro 
referente científico, el doctor valenciano Ángel Escudero
 Juan, son 
"noesirevolucionarias", es decir, revolucionarias que han
 quitado su miedo 
a través del pensamiento. El doctor Escudero lleva más 
de 40 años operando 
sin anestesia química, sin usar anti-bióticos y con un
 0% de infecciones 
post-operatorias y los partos que atiende, son partos
 sin dolor... sin 
anestesia química. Eso es porque consigue hacer
 entender a sus
 pacientes y futuras mamás que su 
cerebro es más poderoso de lo que imaginan y que
 psicológicamente pueden 
ayudarse del recurso de sus bocas llenas de saliva 
para asociarlo a
 la tranquilidad, lo contrario de la boca seca. Se
 llama "noesiterapia"
 que significa curación y 
anestesia por medio del pensamiento, y yo, como el 
doctor Escudero, 
también soy médico cirujano noesiterapeuta así que esa
 técnica la aplicamos 
en  nuestra clínica colectiva, atendiendo también felices
 partos naturales, 
algunos en el agua... y sin peligrosas vacunas para esos 
tiernos, inocentes
 recién nacidos.
   Como una cosa lleva a la otra, nos dimos cuenta de 
que la gente
 miedosa, pero
 con buena voluntad y ganas de aprender, también sería
 capaz de
 aprovechar 
esta técnica humanista de nuestra clínica para la 
revolución social. 
Darse cuenta del cartón-piedra que forma nuestro sistema y de que
 los poderosos 
SOMOS NOSOTROS 
y no los mafiosos y... otros entes, si es que los hay, es la base para 
interiorizar la psicoanalgesia volitiva que repele el miedo.
   Tras un silencio largo después de esta intensa exposición 
de la realidad 
me di cuenta de que Samuel acabó de hablar y entonces dije:

  -Hay algo que no me cuadra. Todos tenemos que pagar
 impuestos. Y eso
 se hace 
con la moneda oficial.
  -Claro. Respondió mi amiga Aurora.-¿ Por qué te crees que sigo 
perdiendo parte 
de mi valioso tiempo especulando en Bolsa?. Esa tarea forma parte
 de mi trabajo 
como contable para ir sacando tajadas al sistema que reviertan en el 
camuflaje de 
nuestra moneda, o sea, en pagar los dichosos impuestos a la 
mafia y por
 eso las 
auxiliares de ayuda a domicilio podrán cobrarlo todo en 
neo-maravedíes
 si quieren.
  -Aunque eso tiene que ser provisional.- añadió mi amigo Juan.- 
ya que especular 
en Bolsa es trabajar para ellos y desgasta mucho psicologicamente
 al no disponer de información privilegiada.Llegará un momento en
 el que habrá que declarar que no podemos con tantos impuestos, 
que nos los bajen, que se trata de un servicio 
social SIN ÁNIMO DE LUCRO, aunque no nos van a hacer caso. 
Y en cuanto se 
enteren de que el neo-maravedí tiene bastante movimiento, 
sufriremos persecución 
y por eso nos estamos entrenando mentalmente.
Si el secreto de la subsistencia al margen se basa en el apoyo mutuo
 y el trueque, el secreto de la transformación social consiste en lograr 
que el tejido social PIENSE y
 ello forme un efecto paraguas que luego se convierta... en un 
efecto DOMINÓ.
  -De hecho.- intervino Laia, una chica de mi edad de las que se
 habían animado 
a formar la cooperativa de ayuda a domicilio.- mucha gente está 
muy animada con
 nuestra moneda local porque nota que aumenta su poder adquisitivo
 y eso de que 
nuestro sindicato anti-usura emite neo-maravedíes y los presta 
sin intereses, les 
deja con la boca abierta. Esa buena señal, más la técnica de la 
noesirevolución 
son un buen comienzo.
   Aquella noche toledana, que nunca me la quitará nadie, salimos
 a dar una vuelta
 todos juntos, a disfrutar de las vistas al aire fresco. Asomarse al
 barranco del río Tajo desde nuestra terraza mientras  bebíamos 
unos zumos naturales de diversas frutas y contemplábamos esa
 parte de la ciudad iluminada, se pagó en neo-maravedíes.
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   Y ese fue el comienzo. O el comienzo conmigo. Y después
 el comienzo
 con otras personas. Y después... el comienzo de los problemas. 
Problemas... mezclados con 
nuestras vidas personales. Juan y yo hacíamos muy buena pareja y 
Aurora tuvo a su primer hijo, un feliz noesibebé nacido tras un parto
 natural de primera categoría, 
criado con leche materna, que es la que refuerza al sistema
 inmunológico y 
la mejor alimentación orgánica, sin aportes extra con peligrosas
 vacunas de 
dudosa y baja eficacia... Ahí dejó de jugar en Bolsa para dedicarse
 en cuerpo y 
alma a su hijo, y las dos colectividades sanitarias tuvieron sus tiras
 y afloja, forcejeos
 con, y amenazas de, la mafia, por el tema del abusivo reclamo
 de impuestos 
insatisfecho.
   Pero todo iba saliendo bien porque la noesirevolución funcionaba,
 igual que la noesiterapia y el efecto paraguas se estaba haciendo 
demasiado grande teniendo en cuenta que más de medio Toledo, 
sin contar a la parte nueva, conocía 
empíricamente la técnica de la clínica, conocía el sindicato anti-usura 
y su técnica noesirevolucionaria. El neo-maravedí y el trueque 
estaban en plena expansión. 
La ciudad, tanto la antigua como la nueva, guapeaba con 
decisión.Nunca antes se 
había visto tanto trajín de restauración de edificios, calles, 
muebles, equipamiento urbano...Nunca antes se había visto tanta
 autenticidad artesanal y amor 
por el trabajo... porque nunca antes se había pensado en el bien de
 la comunidad como la mejor moneda de cambio.
  Sin duda alguna, lo mejor de todo fue, cuando casi todos los
 operarios de una
 fábrica de armas pidieron la baja voluntaria.
  Nunca los mazapanes de Toledo fueron tan dulces, nunca.
   Pero la mafia intentaba estropearlos, lo notábamos; no nos 
afectaba, no nos 
dolía, no nos metía miedo... solo lo notábamos.
   Éramos muchos, y muchos turistas se habían llevado la 
noesirevolución a
 Madrid, a otros puntos de la península ibérica y a otros
 lugares del mundo.
   Pero nada dura para siempre, y pese a que la policía también
 colaboraba con nosotros,consiguieron que unos mercenarios
 empezaran a meter a
 gente en la cárcel.
Se llevaron entre otros a Samuel y a Laia. Aurora logró escuchar la
 consigna de
 él en ladino mientras era golpeado y reducido por unos cuantos
 militares a 
sueldo en la estancia contigua, gritándole que escaparan ella y
 su bebé por 
el pasadizo.
 Aún no me explico cómo no le mataron, pues la mafia ya estaba 
destapando
 su verdadero rostro, ya estaba desesperada. Aquello fue... 
¿un milagro?. Un 
milagro para él, pero no para otros. Me acuerdo de Tomás,
 que adquirió mucho
 renombre por haber sido capaz de hacer los mejores mecanismos 
de relojería para adaptarlos a relojes de pulsera damasquinados y 
enseñar su técnica a quienes se interesaran, consiguiendo desplazar
 a los carísimos relojes uniformados de la globalización.¿Y Rosa, 
la psicóloga que conseguía quitar las depresiones 
introduciendo a sus pacientes en el grupo noesirevolucionario 
y leía lúcidos 
textos sobre cómo materializar la utopía para encontrarnos 
a nosotros mismos, 
darle un sentido a la vida, etc en una radio local?
  Pero la gente no se asustaba. Se enfadaba. Pese a estas atrocidades, 
sabíamos 
que teníamos poder y estábamos dispuestos a plantar cara y 
NO OBEDECER NI SENTIRNOS CULPABLES. La infiltración de nuestro 
movimiento mental fue tan 
importante que incluso el seguimiento del fútbol y sus celebraciones
 se resintió. 
¡Ya no era algo tan popular!. Encima con estos ataques que estábamos
 sufriendo 
hubo muchas bajas en la afiliación de los equipos. ¡El fútbol 
no conseguía 
invisibilizarnos y las bajas trataban de invalidar esa estrategia 
y expresar que
 sabemos su juego!
  Sí, sabíamos que las fuerzas estaban bastante igualadas 
porque parte de su
 meccano social se había desenganchado. Otra parte, no les
 funcionaba 
correctamente. Pese al asedio del Alcázar, donde estuvimos, entre
 los refugiados
 Juan y yo, la destrucción del sindicato anti-usura, los destrozos de
 la clínica y el geriátrico... 
   Nunca conseguirían estropear todos los mazapanes.
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  Aquello ya pasó y aunque ahora ya no hay fábricas de armas, 
se trabaja por 
el bien de la comunidad, el dinero y la televisión son 
del pueblo... no hay que 
bajar la guardia. NUNCA. Como dice Lara Besalú en su canción:

                    "Aunque sientas
                      que el Sol es tuyo,
                      la Luna está llena,
                      tus alas son inmensas
                      y el miedo es nulo... 
                      recuerda,
                      que en este mundo,
                      alguien te quiere presa,
                      ave viajera"

                                                                  Ania V.T.



   

   


  
    

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